Hablamos con Nicolás Vetromile, montajista, trabajador audiovisual y delegado general adjunto de ATE INCAA, sobre la reciente iniciativa del gobierno de reducir y reorganizar la estructura del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales.
“Quiero desterrar de plano la nota que salió en La Nación el viernes. No se cierra el INCAA, todavía, porque ese es el problema. El gobierno nacional ya lo había anticipado antes de ser gobierno, Ramiro Marra y el propio Milei dijeron que al INCAA lo iban a cerrar; de lo que no se avivaron es que como todo organismo del estado tiene una ley y esa ley para poder sacarla la tenes que sacar en el Congreso.”
“El problema es que la decisión que hay hoy no es cesantear y no es exceptuar de la presencialidad a 250 trabajadores, esos 250 trabajadores pertenecen a las áreas que reestructuraron. Eliminaron la Gerencia de Fomento, de Fiscalización, de Internacionales y de exhibición y las fusionaron en una de Políticas Públicas, como si fuera tan fácil. Las cuatro gerencias hacen cosas totalmente distintas. Una tiene que ejecutar la mitad del presupuesto para subsidios, eso no está en ningún lado de la estructura. El fondo cinematográfico se nutre no del alimento de los niños pobres de Chaco, sino del 10% de las entradas de cine y del 25% de lo que gira el ENACOM. De eso que ingresa al instituto, la mitad va para los subsidios a la producción. No está en ninguna parte de la nueva estructura quién se va a encargar de los subsidios, ¿qué van a hacer con ese 50%?”
“Por otro lado, el segundo objetivo de la ley es la regulación, que la hacia la Gerencia de Fiscalización, que controla la cuota pantalla, que es que los cines le den el espacio al cine argentino; está establecido por ley. No está en ningún lado eso, solo actualizan el registro público de la cinematografía argentina.”
“Acá el problema no es que estos vienen a ordenar, a restructurar, a acondicionar la cuentas y demás; acá vienen a destruir, a darle un fuerte golpe al cine independiente, porque quien se nutría de los subsidios a la producción era el cine independiente. Quien se nutría de la quinta vía, que es la vía de documental digital, es el cine independiente. Vienen a eliminar todo eso.”
“Primero hay que desterrar esa idea: el INCAA no se cierra, por lo menos no ahora y ojalá que nunca. Nosotros luchamos para que no suceda. Estamos yendo a las puertas del instituto para hacer ingresar a los compañeros porque están dispensados de la presencialidad, lo cual no significa que no puedan ir a trabajar o a sus puestos de trabajo. Estamos yendo todos los delegados todos los días a acompañar el ingreso de nuestros compañeros a las diferentes oficinas. Yo trabajo en la ENERC done no hay nadie dispensado, pero me voy a mover a otro edificio para acompañar a los trabajadores que estén por ingresar.”
“Ni los trabajadores del audiovisual ni los del INCAA tenemos la culpa de las producciones que no salieron. La mayoría de los presidentes del instituto se fueron con causas judiciales, algunas armadas, otras dudosas, otras concretas, pero lo que te puedo decir es que ninguno de los trabajadores el INCAA tienen una causa judicial. Lo que creo es que la batalla no es ni siquiera judicial, política o económica, es ideológica. Es destruir a quienes criticaron a todos y cada uno de los gobiernos, porque si hay un espacio cultual que se sentó a criticar a todos y cada uno de los gobiernos fue el cine, y principalmente el independiente. Este ponía en el tapete todos y cada uno de los conflictos: los agrotóxicos, la megaminería, los trenes; sino preguntale a Pino Solanas. Él, pobre, no puede hablar, pero su cine si habla y eso es lo que hay que desterrar según la mirada de esta gente, desterrar la crítica. También se escuchan voces que decían en algunas reuniones con asociaciones audiovisuales que iban a revisar bien las presentaciones porque no querían cuestiones políticas de los últimos 15 años, eso se llama censura previa.”
“Son inútiles e inoperantes. Le mandaron la dispensa de presencialidad hasta a gente que está trabajando en el festival del BAFICI, o sea, a los trabajadores del INCAA que cumplen funciones ahí dentro del cine Gaumont. Es muy loco. La gente va a ir a trabajar igual porque tienen que cumplir con eso, pero también hay que entender que es una situación muy particular y que, por ejemplo, el director del BAFICI había dicho que era bueno el recorte del INCAA, que estaba bien eso, ¿qué va a opinar si se cierra el INCAA y no pueda seguir proyectando las películas que tiene previstas en el Gaumont?”
“En base a las acciones, hoy acompañamos a los trabajadores al ingreso, mañana hay asamblea y acompañamos a la marcha de las universidades, el jueves hay actividad de ATE nacional que es una marcha a Plaza de Mayo y el viernes tenemos una actividad en las puertas del instituto, que seguramente será una conferencia de prensa o algo así.”