"Es una propuesta ambiciosa la del gobierno argentino, pero se puede conversar".
"Esto es una partida de truco o de póker. Lo que pasa es que los jugadores del lado de los acreedores son profesionales. Del lado argentino somos profesionales pero no tanto".
"Esto no es el 2001 cuando la Argentina estaba sola. El Gobierno no quiere entrar en Default".
"El FMI, desde antes del problema del virus, dijo que ´la Argentina no puede pagar la deuda como la tiene´".
"Los gobiernos que forman el Fondo están presionando a los acreedores, quienes tienen una gran capacidad de aguante porque es el negocio de ellos".
"Al Fondo no hay que pagarle mucho en el futuro cercano. La tasa debe ser menos del 3%, es bajísima".