“Lo que está pasando con la Inteligencia Artificial es muy asombroso, para los que venimos hace muchos años investigando este tema había una sensación de mucha frustración y estancamiento con lo que la ciencia ficción se había ocupado de imaginar y lo que nosotros pensábamos, las cosas no estaban sucediendo” dijo Santiago Bilinkis en El Disparador.

“Se había trabado en la potencia del hardware, es decir en la potencia de las máquinas necesarias para crear redes neuronales suficientemente grandes. Y en un aspecto técnico relacionado con el CPU, que procesan secuencialmente muy rápido pero en orden. Y hace unos años las industrias de videojuegos con un mundo inmersivo, no podían resolver los gráficos de todo un entorno con múltiples cosas en movimiento con los chips normales de CPU y crearon otro que se llama GPU, que está en la placa de video. Esto resultó ser lo que destrabó en buena medida el avance de las Inteligencias Artificiales.”

“Vos podías hacer una máquina capaz de ganarle al número 1 de ajedrez pero no podía jugar al Ta-Te-Ti, no podía hacer ninguna cosa más que esta tarea ultra específica para la que había sido programada. Recién con el uso de redes neuronales profundas empezamos a caminar un recorrido más interesante.”

“Lo último que paso es la aparición de las redes neuronales generativas, vos a las profundas podías entrenarlas para hacer una tarea como reconocer imágenes. Las redes generativas invierten ese proceso, una vez que la entrenaste para que reconozca lo que hay en una foto, podes pedirle que cree una imagen nueva en base a lo que sabe y genera una foto nueva que no es ninguna de las que vio dentro del proceso.”

“La última gran llegada fue la del Chat GPT, en noviembre del año pasado, que hace esto mismo pero con texto. Le pedís cualquier cosa y el texto te lo resuelve, no es una tecnología de laboratorio sino una herramienta espectacular para las personas y compañías.  El pedido de poner pausa lo lideró Elon Musk, que fue uno de los fundadores de los que creó este chat, no por un interés económico sino por temas personales, ya que él desaprueba la manera en que se está manejando la compañía.”

“Va a cambiar mucho la manera en que trabajamos, no puedo subrayar suficiente la palabra mucho y la mayoría no estamos viendo eso. Yo hice una encuesta consultando a la gente y el 40% dijo que el trabajo iba a cambiar mucho, pero el 95% dijo que su trabajo no. Todo el mundo ve la paja en el ojo ajeno pero se resiste a ver el posible terremoto propio” le comentó Bilinkis a Maxi Sardi.

“La clave va a ser que decidamos como sociedad, imaginate que el resultado de la introducción de estas herramientas permite que se pueda producir lo mismo que se produce hoy, pero empleando la mitad del trabajo humano. Como la riqueza generada sería la misma, la plata para pagarle a los que ya no hace falta que trabajen está, se podría crear un ingreso universal donde cobras un sueldo por existir y se comienza a desvincular el ingreso del trabajo. Es un pacto social que hay que hacer, porque hoy al que cobra un plan se lo ve mal, como una actividad censurable.”

“Hay un camino más interesante, imaginando la misma situación, pero donde mañana todos cobramos el mismo sueldo y todos trabajamos la mitad del tiempo. Una cosa que parecía apocalíptica es algo que todos comienzan a querer, porque está buenísimo que las máquinas reduzcan el trabajo a la mitad de tiempo.”

“A mi me preocupa la dimensión geopolítica, que es qué pasa si China o Rusia adquieren una súper inteligencia antes que occidente. Porque el primero que lo logre tiene un incentivo bastante fuerte a utilizarla para afianzar su liderazgo con respecto del mundo con la mentalidad cuadrada y nacionalista con la que habitamos el planeta hoy” declaró Santiago Bilinkis.