“No solamente el kirchnerismo se apropió del peronismo sino que le ha sustituido la identidad. No tiene nada que ver con el alineamiento geopolítico que plantearon ni con la estructuración de todo un sistema de ayuda social, que se convirtió en un mecanismo de sujeción y de generación de un clientelismo político. El peronismo siempre ha tenido como elemento central el trabajo, es la única clase de hombre que reconoce” dijo Miguel Ángel Toma en El Disparador.

“Trabaja todo aquel que produce como dependiente, empresario o profesional, todo eso se ha perdido. Se perdió la cultura de trabajo en pos de ese mecanismo perverso que no representa al peronismo. Evidentemente el peronismo republicano, que tiene su figura central en Miguel Ángel Pichetto, somos los que participamos de este espacio constituyendo una de  las 4 columnas que sostienen la coalición opositora. Reivindicamos desde este lugar y en actitud opositora, que no es contra el peronismo sino que tratamos de rescatarlo de quienes hoy lo usurpan.”

“Este gobierno ha sido un fracaso desde el origen, lo hemos dicho desde el principio, la desaparición del poder real y formal en la persona del presidente y la sustitución de este por una vicepresidenta, no podía llevar sino a una derrota. Toda condición bifronte se neutraliza entre sí por el conflicto interno, como estamos viendo. Lamentamos que muchos peronistas con los que compartimos muchos años de militancia  hoy estén sujetos por esa metodología de caja o látigo que es el kirchnerismo, doblegado a la imposición de este núcleo.”

“Toda coalición, por sus características, tiene un elemento sustancial que es la definición de un liderazgo. En Juntos por el Cambio la demora que se está produciendo en la aparición de un liderazgo claro y definido es un obstáculo que nos impide avanzar en la consecución del objetivo, que es desplazar a este gobierno fracasado y poder instaurar un programa” le comentó Toma a Maxi Sardi.

“En Juntos por el Cambio es indispensable constituir un liderazgo claro y definido que ordene la interna. Y segundo, la elaboración o propuesta de programa de gobierno que sea capaz de presentarse ante la sociedad como la alternativa que ofrecemos para salir de la crisis en la que estamos. La demora que tenemos es un factor que muestra una suerte de debate interno que no es conveniente a los fines que nos planteamos. Entendemos que la definición de estos dos elementos debe ser prioritario y en el menor plazo posible.”

“Lo que hizo el kirchnerismo en lo relacionado al Consejo de la Magistratura es un acto político de dudosa legitimidad, en el sentido en que duplica la apuesta. Profundiza la confrontación con la estructura judicial y con la cabeza de esta, que viene de la mano de la estrategia de Cristina Fernández de Kirchner, que es la de victimizarse y confrontar con la justicia en todos los campos, pensando en sostener el intento del relato y plantearse como una víctima de la “persecución” judicial.”