“Lo que invocamos desde amnistía y lo hemos hecho con Argentina o los países de la comunidad es justamente condenar los hechos que están ocurriendo en Nicaragua desde 2018”.

“Parte de los argumentos que ha usado la Argentina en el principio de no injerencia de otros países, lo que decimos desde amnistía es que ese principio no se aplica donde ocurre violaciones de derechos humanos como pasa en Nicaragua”.

“Hubo una masiva manifestación en en 2018 en Nicaragua sobre medidas que venía implementando el Congreso, el Gobierno desplegó una estrategia represiva que con el correr de los años se fue endureciendo con acciones que van desde las desapariciones forzadas y además también con un poder legislativo que han ido sancionando leyes afines al oficialismo”.

“Hay discrepancia en cuanto a la cantidad de población que ha ido a votar y estos hechos tienden a estar relacionados con el comienzo en 2018. Se apela a herramientas que son apoyadas por todos los estados”.

“La respuesta de la Cancillería Argentina fue la invocación de este principio de no intervención. Amnistía no tiene color político, eso es algo que nos identifica y nos permite trabajar con 170 países en el mundo”.