“Es la certificación de fracaso económico. Me sorprende que haya tanta gente sorprendida por dónde estamos. Hubo un plan económico que empezó mal en 2016. El mercado se le fue cambiando al gobierno. Es un gobierno que dijo que la inflación era muy fácil de manejar, dijeron que los impuestos iban a bajar y los subió”.
“Se pueden tomar medidas de esta naturaleza, mientras tanto se gana tiempo. En ese tiempo, las medidas se orientan al arranque de la Argentina. Ese tiempo se pide para poder empezar a crecer, producir y tener medios genuinos de pago. Si uno se toma el tiempo, como dice el gobierno para insistir con lo mismo, lo único que estamos haciendo es postergar el problema. Son medidas de tinte electoral. Cuando el presidente Mauricio Macri se queja después de las PASO y le dice a los que ganaron por 17 puntos que reflexionen, son ellos los que tienen que reflexionar y no el gobierno. Estamos acá por lo que ellos han hecho. El presidente fue claro cuando le dijo a la oposición que los iba a ayudar”.
“Alberto Fernández ya tenía calculado este viaje a Portugal, que es un modelo que pudo negociar con el FMI con lo que necesitaba y le salió bien, no como a Grecia. Desde octubre del año pasado, tuvimos una reunión con el FMI y le mostramos los números. Planteamos que íbamos a tener que tomar medidas para el ingreso de capitales. El FMI tiene claro que por este camino es imposible generar crecimiento, que es lo único que garantiza el crecimiento fiscal y el pago de la deuda. Hay capacidad de la recuperación de la economía de la Argentina, no me cabe ninguna duda. Falta mucho para poder decidir si voy a ser Ministro o no”.
“Los primeros pasos de Mauricio Macri fueron inconfundibles. Decretó el ingreso estricto de capitales, subió la tasa de interés y planchó el tipo de cambio. Esas medidas, siempre cuando las tomó Cavallo y Martínez de Hoz, terminaron de dos formas, mal o peor. Convirtió a la Argentina en un país carísimo para exportar, barato para importar, y destruyó el aparato productivo. Cuando nosotros vemos estas tres medidas, sabemos que termina mal. Vamos a tener que plantear como liberamos la energía productiva argentina que esta aplastada. La capacidad de reacción de la Argentina es muy fuerte”.