“Arrancamos en 1996 con los piletones ayudando a 16 personas y hoy le damos de comer a muchísimas personas, familias, niños y abuelos. La situación es cada vez más difícil y desde hace ya varios años. Hemos pasado muchos gobiernos pero nunca habíamos vivido una situación como esta, nos golpeó muchísimo. Tuvimos que empezar a cocinar los días sábados”

“El gobierno no nos ayuda ni económicamente ni con alimentos, es una cuestión política, te adjudican una relación con otro gobierno y no te ayudan. Yo no pregunto a los que les doy de comer a quién votó, no me interesa. Tengo derecho a votar distinto y esto hace que me castiguen de esta manera”

“La gente sigue colaborando y vamos dividiendo. Hacemos magia para seguir ayudando gracias a la gente que trabaja conmigo. Todos los días se suman familias nuevas, hay gente que tiene trabajo y viene porque no tiene para comer. Viene gente de todos lados, le damos comida, medicamentos, las vitaminas para los nenes”

“Gracias a Dios nunca tuve el problema de que nos entren a robar, y eso que hay muchos chicos que viven en la calle y se drogan, pero por suerte nunca nos ha pasado. A la gente le reforzamos los alimentos para que no tengan que venir todos los días. Acá no hay feriado, gracias a Dios tengo un equipo de mujeres que me ayuda y apoya. Son 150 personas que trabajan en total en el comedor”