“El ELA es una enfermedad neurodegenerativa sumamente grave. Afecta a las neuronas motoras que son las que envían señales a los músculos”.
“En esta enfermedad, los músculos dejan de responder y pueden llevar a la parálisis de las personas”.
“Por el momento, la enfermedad tiene tratamientos pero no tiene cura”.
“En los últimos meses se descubrieron dos nuevos fármacos que permiten tratar la enfermedad para mejorar la calidad de vida de los pacientes”.
“Para encontrar la cura todavía queda un largo camino para recorrer”.
“Se conocen algunas de las causas de la enfermedad, pero no todas. Por eso, por ahora, no tenemos una cura”.
“Cuando sucede, no funciona mal una sola cosa en el cuerpo sino que son varías”.
“Las enfermedades neurológicas son mucho más complejas que, por ejemplo, las virales”.
“Se estima que en el 10% de los casos la enfermedad tiene un vínculo hereditario”.
“Hay más de 40 genes de ELA descubiertos hasta el momento”.
“Si hay solo un caso de ELA en la familia, las probabilidades de que los hijos y hermanos contraigan ELA es un poco más elevada que de la población general, pero no mucho más elevado”.
“Uno no solamente concientiza a la gente común, también lo hace para los profesionales de la salud porque la enfermedad es poco frecuente”.
“Los síntomas y los signos pueden ser una falta de respuesta en una mano, en una pierna. No es un dolor, puede ser una falta de fuerza en el agarre o una renguera”.
“También puede haber una dificultad en el habla, como le sucedió a Esteban Bullrich”.
“Hay una gran variedad dentro del universo de pacientes que observamos en todos estos años. Algunos tuvieron una progresión de la enfermedad muy rápida y otros más amesetada”.
“En el caso promedio, entre que aparecen los síntomas y se diagnostica, los signos y las marcas en el cuerpo son bastantes notorias”.
“No es una enfermedad que se pueda anticipar. Cuando aparecen los síntomas el procedimiento más común es una resonancia magnética, pero el examen que da con el diagnóstico definitivo es el electromiograma”.