Carolina Carrillo: “El 4% de la población argentina tiene Chagas”

Hablamos con Carolina Carrillo, Bióloga e integrante de la Asociación Civil Hablemos de Chagas por el Día Mundial del Chagas y todo lo que tiene que ver con la enfermedad.

“La falta de abordaje de esta problemática es multidimensional”.

“Muchas personas piensan que el Chagas ya no existe o que le pasa a ciertas personas”.

“En la mayoría de los casos las personas que sufren el Chagas son asintomáticas y no saben que lo tienen”.

“El 4% de la población argentina tiene Chagas”

“El chagas ya no está solo en zonas rurales, más del 65% de la población con chagas vive en ciudades”.

“Hay que pensarlo de una manera actualizada, sabiendo que cualquier persona puede tenerlo sin manifestaciones claras”.

“Tenemos derecho a hacernos el análisis y el tratamiento de manera gratuita”.

“Hay asociaciones de personas con chagas en otros países del mundo”.

“El Chagas es tratable, en algunos casos se cura la infección o en otros se logra que la persona viva con la infección de manera saludable”.

“Es importante un diagnóstico temprano”.

“Cuando recién nos infectamos, podemos tener una fiebre o una descompostura o directamente nada”.

“Cuando el parásito ingresa al cuerpo se acomoda en las células cardiacas”.

“Podemos manifestar síntomas clínicos en un 30% de los casos y lo más común son las afecciones cardiacas”.

“Muchas personas que tienen estos inconvenientes no saben que puede ser por motivo del Chagas”.

“La prevención necesita de muchas acciones conjuntas”.

“Existe la ley de chagas, que significa que toda persona embarazada tiene que ser testeada para ver si hay riesgos de que su bebé pueda nacer infectado”.

“Otra forma de prevenir es en las zonas donde conviven las vinchucas. Se necesitan fumigaciones y compromiso comunitario”.

“La comunicación social es muy importante”.

“Es una de las pocas leyes que aborda la problemática de la salud con una mirada en la comunicación social”.

“Es buena idea pedirle a nuestro médico que nos haga un diagnóstico si nunca nos hicimos uno”.

“Si vivimos en una zona de alto riesgo, puede ser otra buena oportunidad para hacerse el diagnóstico”.