"El rol de una maestra es hiper importante, porque el docente es una figura de mucha presencia en la vida de los chicos, entonces es seguramente esa línea de defensa que tiene para expresar lo que no puede con otro adulto".

"Hay algo que es clave, el tema de la Ley Lucio, que por primera vez le va a dar la posibilidad a cualquier persona de hacer denuncias de manera anónima y esto es importantísimo porque vimos muchísimas veces que el docente, directivo o el personal de la escuela reciben amenazas por parte de la familia".

"Por un lado, en el sistema tradicional de educación, a veces es muy difícil darse cuenta que los chicos les pasa algo".

"El docente muchas veces está solo o le falta capacitación para ver".

"Las señales de alarmas son muchas, también hay otros casos por parte de la familia, por padres o madres que culpan al chico de cualquier cosa o los tratan de manera despectiva".

"No hay aprendizaje si no hay vínculo, tenemos que crear lazos y vínculos de confianza para que pueden contar lo que les pasa y que pueden hacer la diferencia entre la vida y la muerte".

"Antes de hablar de la capacitación, hay que enfocarse en la concientización, hay que generar empatía, hoy fue Lucio, mañana puede ser cualquier otro".

"Hoy el docente está en una situación muy complicada".

"Hay que empezar a humanizarnos, está bien que se implemente la tecnología pero no podemos perder la empatía con el otro".

"Necesitamos estar nosotros para esa mirada compasiva, si nos hacemos los distraídos, estaremos haciendo un daño muy grande".

"Hay que tener muy en cuenta la delgada línea cuando se "sospecha" que al chico le pasa algo".