“Hay que destructurar los mitos y los prejuicios de no poder “controlar” una enfermedad, como si todo fuera manejable a partir de uno. El día de la salud mental le viene a dar entidad a esto”.
“Es un error poner a la salud mental al mismo nivel que la salud física porque son paradigmas distintos”.
“En la pandemia aumentaron los casos de ansiedad, depresión y estrés. Redujo mucho el contacto social y eso trajo ansiedad y estrés”.
“Mi recomendación es poder empezar a validarse, a hablar de lo que uno piensa y lo que le pasa, empezar a compartir lo que uno siente. Además, hay que empezar a llevar un autorregistro de cómo uno se siente”.
“Muchos necesitan estar sobrepasados para no tener registro de lo que les está pasando”.