Félix Lonigro: “Este no es un procedimiento propio de un sistema republicano”

Hablamos con Félix Lonigro, Abogado Constitucionalista, sobre la marcha convocada desde distintos sectores del oficialismo en Contra de la Corte Suprema.

“La marcha del 1 de febrero es un delirio producto del populismo que está en el ADN de este gobierno. Cuando a un gobierno le molesta todo lo que funciona de forma independiente, llámese Justicia, fiscales, periodismo, es porque empieza a tener rasgos de populismo. A los únicos gobernantes a los cuales consideran importantes, son los que tienen legitimidad democrática de origen, es decir, los que son elegidos por el pueblo. Entonces, todo aquello que no es elegido por el pueblo, que va independiente de su propia voluntad, ellos se preguntan ‘¿Estos quiénes son? ¿Quién los votó?’. Nada más que escuchar el discurso de Cristina Fernández en 2009 desde Santa cruz, donde decía, ¿Quién es un juez a quién nadie votó?, para dejar sin efecto una norma dictada por un órgano cuyo miembros la gente votó. A ellos les molesta el Poder Judicial”.

“En el caso de la Corte Suprema, como ellos no la pueden dominar ni siquiera desde el Consejo de la Magistratura- no hay que olvidarse que tiene políticos, y hay políticos del oficialismo- desde ahí puede domar a los jueces inferiores. Pero como el Consejo de la Magistratura  no tiene competencia sobre los jueves de la Corte, entonces tienen un cabo suelto. No lo pueden hacer desde el Congreso, iniciando juicios políticos porque no tienen votos. Largan a la hora de irracionales a la calle, para pedir desde la calle, la destitución de los jueces de la Corte. Este no es un procedimiento propio de un sistema republicano. Cuando el derecho a la libertad de expresión afecta a las características de un sistema de gobierno, como es la República, empieza a ser abusivo. No se puede salir a gritar a la calle ‘Se tienen que ir todos ustedes’”.

“Señor presidente, ¿usted quiere que la Corte tenga más cantidad de miembros? Presente un proyecto de ley. ¿Usted quiere que la Corte se vaya? Inicie juicio político o haga un planteo de inicio de juicio político o tome a algunos de los diputados que tiene en el Congreso y pídale que formalice la acusación como corresponde. No lo puede hacer, por eso avala estas cosas, que inclusive son avaladas por el Juez Federal Padilla, a quien por este motivo habría que iniciarle un procedimiento de remoción en  el consejo de la Magistratura”.

“Hay una hipocresía muy grande. Ellos pregonaron que la corte tiene que ser independiente cuando ellos mismos al Poder Judicial lo han presionado toda la vida”.

“Tampoco tienen, desde el 10 de diciembre, mayoría en ninguna de las cámaras. También, temen perder una batalla. Cada vez que el Presidente envía un proyecto de ley no se sanciona, es una batalla política perdida. Es lo que no quieren en este momento para no seguir debilitando la base de sustentación que tiene este gobierno. Por eso, no lo hacen desde ahí, lo hacen desde la calle”.

“El proyecto sobre la cantidad de miembros que integra el consejo de la Magistratura, es un proyecto que está vinculado con la decisión de la Corte en declarar inconstitucional la ley que está vigente que establece que la Corte tiene trece miembros, de los cuales siete son de la corporación política. Tres diputados, tres senadores y un participante del Ejecutivo. Entonces, la Corte dice que no hay equilibrio y que hay que volver a la composición anterior de 19 miembros. En el medio, el Presidente propone un proyecto de ley para subir a 17 miembros. Como el plazo es hasta abril, quieren tratar ese proyecto de ley ahora para que el proceso no quede sin funcionamiento”.

“Es una marcha y después está programada una contra marcha el 3 de febrero. Yo que soy anti marcha, voy a ir porque está en cuestión la república. Voy a estar presenta para apoyar”.

“Esas marchas son una demostración de fuerza que a ellos les encanta hacer. Seguir profundizando la grieta”.

“Tiene que pasar mucho tiempo para que haya una percepción de que la justicia funciona sin presiones. Durante este tiempo, tiene que quedar claro que nadie se mete con los jueces, entonces los jueces no van a tener temor y apurar fallos según los vientos políticos. Es una conjunción de factores, y fundamentalmente, tiene que ser un tema cultural”.