“Exponer en el Congreso fue sinceramente bastante triste”.

“Por un lado, fue alegre exponer y observar cómo otras personas exponían sus puntos, la vehemencia, las ganas”.

“Por otro lado, el trasfondo de eso me pareció un blef. Vi poco interés de los legisladores, muchos mirando el celular, sacándose selfies. Eso me pareció patético”.

“A mí me pareció lamentable, me dio vergüenza ajena la situación”.

“Quizá no debería haber tantos expositores, ni deberían haber tantas sesiones y se debería filtrar mas. Pero que inviten a 50 personas y que de esas vayan 10, me parece una burla no solo a las personas sino a la democracia y a la gente que sigue esto por Internet”.

“Fue algo triste y patético”.

“Es la novena sesión, y no había ninguna persona famosa ni controvertida, y el interés había caído”.

“Me pareció una cortina de humo”.

“Había gente que estaba diciendo cosas muy importantes en frente de 5 ó 6 personas que se estaban sacando fotos”.

“Cuando expuse, no había nadie. Fue como si me metieran en un set de filmación y fue una cosa medio actuada”.

“Si no vamos a escuchar a la persona con la que no estamos de acuerdo, ¿de qué sirve esto?”

“Lo que no tiene sentido es que todo esto es para informar a las personas que van a decidir, y si esas personas no van, no tiene lógica”.

“Yo intenté poner en valor las cuestiones científicas. Las discusiones muchas veces pasan por el marco legal, político o social y creo que la decisión debe tener un punto de vista científico que debe ser escuchado”.

“La ciencia dice que la ilegalidad del aborto no tiene ningún sentido, y muchas veces no se la escucha”.

“Cuantos más ojos y datos se pongan en evidencia, mejor”.