Con respecto a las conclusiones que nos deja el Mundial y Sabella, el filósofo afirmó: “Soy más sabellista que filosofo. Me hace ruido pensar que fue algo improvisado. Sabella más que ninguno venia pensando la necesidad del equipo. Siempre supo a lo que quería jugar, si hay una enseñanza del bilardismo es que cada partido es único y hay que pensar cada partido como una batalla. Sabella no es de los técnicos que tiene un plan y lo ejecuta pase lo que pase. Es un enfermo de la táctica al servicio del juego. Todo aquel que dijo que a Sabella le faltaba autoridad tras el tema con Lavezzi no busco ni en google la relación del técnico con el plantel. Había que construir un Sabella enemigo. Tiempo Argentino y Clarín esgrimían los mismos argumentos contra Sabella, unió ARGEN con TINA. Sabella es un post-bilardista. El bilardismo ha sido útil a todos los anti-bilardistas. En el juego serio, un equipo solidario, no se priorizaban a si mismos. En lo discursivo lo más fuerte, los jugadores ya no pecan de vedetismo, sino humildad y sacrificio, donde la unidad es mas importante que el exitismo de las individualidades”.
“Sabella es un post-bilardista”
Despues de la derrota del domingo salieron a la luz los detractores y defensores de Sabella, Dario Sztajnszrajber, es filósofo pero se reconoce como Sabelista.