“Pasaron muchas cosas, mañana vamos a informar y mostrar algunos gráficos. Acá hubo responsabilidad de los tres poderes del Estado. Un error fundamental fue la decisión del fiscal interviniente en su momento, cuando comenzaron a aparecer las víctimas, en delegar la mayor parte de la investigación en la morgue policial dependiente de la policía científica a cargo de dos comisarios fuertemente cuestionados por el caso Candela. No se realizaron autopsias en los cuerpos, no se dio alerta en los hospitales y clínicas. Durante el momento de la inundación la misma policía decía que no judicialicen el caso y así no se computaban las víctimas. Hubo muchísimos problemas de pruebas que dificultaron que se conociera con exactitud todas las víctimas”.
“Hemos tomado conocimiento de falsedad en certificados de defunción, victimas ahogadas que su certificado decía cáncer de hígado. Hay viejas prácticas mantenidas de la dictadura y legislación insuficiente que permiten que estas cosas puedan suceder. El poder judicial sigue delegando como en los viejos tiempos en la policía. Puede haber más víctimas, quedaron muchos casos sueltos, algunos casos de niños que no pudieron encontrar su paradero, muchos casos de cuerpos flotando que no se pudo encontrar su paradero”.